¿Qué es la clausula suelo?
En el ámbito de las hipotecas y el sector financiero, a lo largo de muchos años, las entidades financieras, anticipándose a la posible caída de los índices utilizados para el cálculo de los intereses hipotecarios, decidieron añadir cláusulas concretas que, como consecuencia, restringían la bajada de dichos índices. De esta manera, se impedía reducir la cuota mensual a pagar por los clientes hipotecarios y, al mismo tiempo, se incrementaban los beneficios de los bancos.
Estas reglas, conocidas como cláusulas suelo, se implementaron con el objetivo de impedir que los pagos realizados por los clientes a las entidades financieras descendieran por debajo de un límite mínimo establecido. Este límite, que era fijado por los bancos, servía como garantía para asegurar un beneficio mínimo en las hipotecas. De este modo, las entidades financieras lograban mantener un beneficio constante, incluso si los índices de referencia disminuían considerablemente. En consecuencia, los clientes quedaban obligados a pagar cuotas más altas, sin poder beneficiarse de las reducciones en los tipos de interés. Por lo tanto, estas cláusulas aseguraban a los bancos un margen de ganancia fijo, sin importar las fluctuaciones del mercado.
Esta cláusula, conocida como cláusula suelo, fue incorporada en numerosos contratos hipotecarios. Como resultado, los clientes continuaron pagando intereses a las entidades bancarias, a pesar de que estas se beneficiaban de los tipos de interés negativos establecidos por el Banco Central Europeo. Debido a esto, los clientes se vieron gravemente perjudicados, ya que sus pagos hipotecarios resultaron ser considerablemente elevados en comparación con las condiciones reales del mercado financiero. En otras palabras, mientras los índices de referencia bajaban, los consumidores no podían beneficiarse de dicha reducción, lo que generó un desequilibrio en favor de las entidades bancarias.
Las cláusulas suelo eran comúnmente implementadas de manera unilateral por las entidades financieras, sin ofrecer a los clientes una información transparente sobre las implicaciones económicas que estas tendrían en sus hipotecas. Por lo tanto, los clientes no eran plenamente conscientes del impacto financiero que las cláusulas suelo podían generar en sus hipotecas, afectando significativamente el costo total de sus préstamos.
¿A quien le afecta la clausula suelo?
Esto afecta a todos los usuarios, en especial a los titulares de préstamos hipotecarios, cuyas escrituras de hipoteca incluían la cláusula suelo. De manera general, la práctica común de la mayoría de las entidades financieras fue establecer un tipo de interés mínimo del 2,5% o 3%. Por este motivo, en el gráfico adjunto puedes verificar si esta condición afecta a tu hipoteca.
Desde 2009 hasta la actualidad, el Euríbor, que es el índice de referencia más utilizado en las hipotecas, ha permanecido por debajo de los límites establecidos por las cláusulas suelo. Como consecuencia, esto ha generado que muchos clientes hayan estado pagando cuotas hipotecarias más altas de lo que les correspondía, debido a los límites impuestos por las cláusulas suelo.

¿Cómo saber si tengo clausula suelo?
Para empezar, si deseas comprobar si tu hipoteca incluye una ‘cláusula suelo’, es fundamental revisar la escritura del préstamo hipotecario, analizar el recibo bancario o consultar directamente con tu entidad financiera.
Sin embargo, lo más recomendable es que nos envíes la escritura de tu hipoteca para analizarla. Si no la tienes o no puedes localizarla, puedes solicitar una certificación literal de tu préstamo hipotecario en el Registro de la Propiedad y enviárnosla para su revisión. De este modo, nuestro equipo de abogados revisará la documentación y te confirmará si tu hipoteca está afectada por la cláusula suelo o no.
¿Qué pasa si tengo clausula suelo?
Según la Sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea del 21 de Diciembre de 2016, la «cláusula suelo» fue declarada abusiva. Por esta razón, las entidades financieras están obligadas a devolver a los clientes las cantidades cobradas de más desde el momento en que dicha cláusula comenzó a perjudicarles.
En DMD Asesores, somos expertos en reclamaciones bancarias. Por lo tanto, déjanos tus datos y, de inmediato, un abogado se pondrá en contacto contigo para ayudarte en todo el proceso.